En México gozamos de una larga tradición en esta materia y por momentos pareciera que el verdadero motor de este país es la impunidad, claro que como en todo hay niveles, pero por simple que sea el hecho, al no tener ninguna repercusión incita a seguirlo cometiendo y por añadidura se van añadiendo nuevos elementos hasta que lo que parecía algo tan simple como pasarse un alto, termina en la muerte de alguien, porque, el microbusero se podrá pasar el semáforo en rojo cientos de veces y al no tener ninguna consecuencia esta actitud se volverá (como ya lo es) normal en él, hasta que un día algo salga mal y la tragedia solo necesita una ocasión...
Todo hecho sin consecuencia invita a repetirlo si de ello se obtiene algo a cambio, o simplemente por el placer de llevarlo a cabo, un asaltante le dispara a la víctima en la cabeza si esta no accede a darle sus pertenencias porque sabe que las posibilidades de que lo castiguen son prácticamente inexistentes, veamos pues que en nuestro país solo se denuncian entre el 9 y el 12% de los delitos cometidos, y de estos, solo 1 de cada 10 verá concluido su proceso con una sentencia quedando impune el 99% restantes ¿que negocio ofrece ese margen de éxito?
Es claro que cuando los organismos encargados de combatir este mal son los principales promotores será imposible que avancemos en esa materia, y tal parece que solo queremos que se abata la impunidad que nos afecta como la de la delincuencia o la de los políticos que con tal de seguir gozando de sus privilegios permiten que la maquinaria siga andando, pues después de todo, eso es precisamente lo que alimenta su ejercicio.
Es por eso que la reflexión sobre el tema debe ser profunda, porque más allá de esperar que las cosas se corrigan por la acción de otros, podríamos empezar por respetarnos a nosotros mismos aunque todos podamos gozar de la generosa sombra de la impunidad...
Ya lo dijo quevedo en su memorial a otro Felipe , a Felipe IV:
ResponderEliminarCatólica, sacra y real majestad
que Dios en la tierra os hizo deidad;
Un paisano pobre,sencillo y honrado
humilde os invoca y os habla postrado.
El honrado, pobre y buen caballero
de plano, no alcanza ni pan ni carnero.
Perdieron su esfuerzo pechos españoles
porque se sustentan con tronchos y coles Cebada que sobra los años mejores
de nuevo la encierran los revendedores. Madrid a los pobres pide mendicante
y en gastos perdidos es Roma triunfante.
En vano es que agosto nos colme de espigas
si más lo almacenan logreros que hormigas.
En vegas de pasto realengo vendido
ya todo ganado se da por perdido.
Perpetuos se venden oficios, gobierno
que es dar a los pueblos verdugos eternos.
Si a España pisáis, apenas os muestra
tierra que ella pueda deciros que vuestra.
Los que tienen puestos, lo caro lo encarecen
y los otros lloran, revientan, perecen.
Crecen los palacios, ciento en cada cerro
y al pobre del pueblo, castigo y encierro.
Ved tantas miserias como se han contado teniendo las costas del papel sellado.
Plazas de madera costaron millones,
quitando a los pobres vigas y tablones.
Un ministro, en paz, se come de gajes
más que en guerra pueden gastar diez linajes. Nunca tales gastos son migajas pocas,
porque se las quitan muchos de las bocas. - Los ricos repiten por mayores modos:
ya todo se acaba, pues robemos todos. Y asi en mil arbitros se enriquece el rico,
y todo lo pagan el pobre y el chico.
El vulgo es, sin rienda, ladrón y homicida Burla del castigo, da coz a la vida.
¿Qué importan mil horcas, dice algunas vez, si es muerte más fiera hambre y desnudez?
Si el rey es cabeza del reino, mal pudo
lucir la cabeza de un cuerpo desnudo. Consentir no pueden las leyes reales
pechos más injustos que los desiguales.
Las plumas compradas por Dios jurarán
que el palo es regalo, y las piedras, pan. Contra lo que vemos, quieren proponernos
que son paraíso los mismo infiernos.
La fama, ella misma, si es digna, se canta no busca en ayuda algazara tanta
Del mérito propio sale el resplandor,
y no de la tinta del adulador.
Y así, de esas honras no hagáis caudal
mas honrad al vuestro, que es lo principal. Servicios son grandes las verdades ciertas. Las falsas lisonjas son flechas cubiertas. Porque por lo demás todo es cumplimiento
de gente servil, que vive del viento.
Si en algo he excedido, merezco perdones. ¡Dolor tan del alma no afecta razones..!
Estado de Derecho, quiere decir falacia donde en la sociedad nadie esta por encima de la ley, en otras palabras donde nadie goza de privilegios que lo eximan de sus derechos y obligaciones.
ResponderEliminarPor ende y por simple razón en un estado donde priva la impunidad, no hay Estado de Derecho, sino un Estado de Privilegios.
Privilegios otorgados por las razones que todos conocemos, que van desde poder económico, intereses comunes de los que ejercen el poder (mejor clasificado como: asociación delictuosa), componendas, cuatachismos, favoritismos, compadrazgos, nepotismo, plutocracia y demas.
Entonces, para terminar con la impunidad, es necesario terminar con todos y cada uno de los privilegios primero.
Saludos mi estimado Ciudadano X
"y tal parece que solo queremos que se abata la impunidad que nos afecta": he ahí el quid de todo esto.
ResponderEliminar¡Excelente reflexión! Vas a las causas y no sólo a los efectos.
"Estado de Derecho", "democracia", "libertad de expresión", etc. falacias todas que, a falta de juicio crítico, se han aceptado servilmente. Esa aceptación, esa sumisión es parte del problema y se revela también en la impunidad.